La Gran Senda de los Primeros Pobladores nos acerca a través de un trekking exigente a un paraje de espectacular belleza repleto de badlands, ríos salvajes e historia. El recorrido nos invita a conocer durante unos 6 días las poblaciones de Huéscar, Castril, Galera, Orce, Castilléjar y La Puebla de Don Fadrique. Su atractivo y dificultad la convierten en uno de los trekkings más destacados de Europa. En esta ocasión nuestro reto hacer La Gran Senda de los Primeros Pobladores en BTT recorriendo en el mismo día sus 150 km de distancia.
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@Report de Pascual Martinez
Por fin, después de posponerla varias veces, hemos realizado la Gran Senda de los Primeros Pobladores (versión para bici) ya que el trazado oficial discurre por varias zonas no ciclables.
El recorrido es impresionante, donde podemos disfrutar del paisaje del Geoparque y de la comarca de Huéscar.
La zona del Río Castril y su cerrada, los badlands de Castillejar y Galera, los infinitos campos de la Puebla de Don Fadrique, el Calar de los Lobos con la Sagra majestuosa, y un sinfín de pequeños rincones que se han quedado en nuestra retina.
La ruta es larga (145 km. 2000m desnivel) y tardamos 12 horas con paradas (muchas).
Los últimos 13 km del recorrido oficial no pudimos hacerlo por falta de luz y tuvimos que terminar por asfalto por la Carretera de las Santas hasta Huéscar.
En fin, otra
gran experiencia en la saca.
Esta vez los compañeros de ruta Pascual, Salva y Juanjo.
En estas fotos podemos observar algunos escenarios de la película "INTEMPERIE" rodada en esta comarca
La Mancomunidad de Municipios de la Comarca de Huéscar, en colaboración con el Patronato Provincial de Turismo de Granada, puso en marcha en 2012 la Ruta de los Primeros Pobladores de Europa, un itinerario circular de 152 kilómetros que recorre los principales lugares de interés turístico de los municipios de Castilléjar, Castril, Galera, Huéscar, Orce y Puebla de Don Fadrique, en la zona norte de la provincia granadina, donde los yacimientos y vestigios arqueológicos encontrados han demostrado que fue uno de los primeros territorios habitados del Viejo Continente. El último de los descubrimientos, un diente de leche de un homínido datado en 1,4 millones de año, encontrado en el yacimiento de Barranco León, en Orce, probaría la presencia humana más antigua de Europa Occidental, quedando patente, además, que los yacimientos de Orce son el registro paleobiológico más importante de Europa para estudiar los últimos millones de años en el mundo, por delante de Atapuerca. El diente, que fue identificado como posible resto humano en 2008, apareció asociado a otras huellas óseas y a una importante industria lítica formada por piedras talladas a mano alzada o a yunque que evidencian que fueron usadas para cortar carne, madera o raíces. El objetivo fundamental es poner en valor el gran patrimonio histórico, cultural y natural de esta zona, perfectamente señalizada y con amplia información de cada uno de los múltiples recursos que la componen.
El recorrido
La Ruta de los Primeros Pobladores de Europa se puede iniciar junto al Castillo de las Siete Torres de Orce, interesante fortificación musulmana del siglo XI, el único ejemplo en su género que aún se conserva en la región. Lo normal es que se visite después la Iglesia de Santa María y el Museo municipal de la Prehistoria y Paleontología, ubicado en el Palacio de los Segura y en el que se recogen piezas de los principales yacimientos de Orce, expuestas en dos grandes salas, con fracciones completas de yacimientos y restos de fauna y de industria lítica, estos últimos considerados como las huellas humanas más antiguas descubiertas hasta la fecha en Europa.
Y desde Orce, a Huéscar, con parada en la Necrópolis de Tútugi que se sitúa en un área vecina a Galera y abarca la mayor superficie destinada a fines funerarios por la cultura íbera en toda la Península. Las piezas más importantes encontradas forman parte de las colecciones del Museo Arqueológico Nacional, destacando entre ellas la famosa Diosa de Galera, cuya reproducción se exhibe en el Museo de Galera.
La segunda etapa, de Huéscar a Puebla de Don Fadrique, se inicia en el Pósito de la ciudad oscense, recientemente rehabilitado y que alberga el legado artístico del dibujante de cómics José de Huéscar, visitándose a continuación la Colegiata de Santa María La Mayor, declarada una de las 7 Maravillas de Granada y sin duda el monumento más emblemático del pueblo. Templo gótico-renacentista de principios del siglo XVI, fue construido bajo la dirección de Diego de Siloé, destacando la portada isabelina de la Sacristía Vieja y la portada principal renacentista, así como la bóveda gótica, la bóveda plateresca y el coro barroco.
Visitada la Colegiata y otros puntos de interés de Huéscar, se sigue hacia Puebla de don Fadrique, cuyo principal encanto radica en su lejanía de los grandes núcleos urbanos. El pueblo se erige al pie de una mole montañosa que corona la Sierra de la Sagra y en época musulmana tuvo gran importancia estratégica al estar situado justo en la franja fronteriza con los territorios cristianos.
La tercera etapa discurre entre Puebla de Don Fadrique y Castril y tiene como punto de partida la plaza de la Iglesia, donde se visita el Museo Municipal Arqueológico-Etnográfico ubicado en el edificio del antiguo ayuntamiento, monumento histórico del municipio. Lo más importante de Puebla de Don Fadrique es su patrimonio sacro, del que destaca la Iglesia parroquial, del siglo XVI. De singular interés también su patrimonio arqueológico, yacimientos en los que aparecen representadas todas las culturas desde la prehistoria hasta la época medieval.
Una vez concluida la visita al pueblo se continúa hacia Castril por la carretera de los Collados de la Sagra, donde es más que recomendable un alto en el Centro Cultural Azzagra, que gestiona un centro de estudios andalusíes y está dotado de amplias instalaciones. Fundado por Abdessamad Romero, un musulmán converso nativo de la Puebla de don Fadrique, imparte cursos relacionados con la cultura árabe y el cultivo ecológico.
Desde la Alquería Rosales, donde se encuentra el citado centro, la ruta conduce hasta el Observatorio astronómico de la Sagra, situado a pocos kilómetros de distancia y operado por el Observatorio Astronómico de Mallorca y el Instituto de Astrofísica de Andalucía. Cuenta con cuatro telescopios robóticos y debido a la contaminación lumínica cero del paraje es de los más importantes para la búsqueda y seguimiento de pequeños objetos de nuestro sistema solar. Tras mirar por los telescopios y aprender un poco sobre las constelaciones, se reanuda la marcha por la carretera de la Losa, donde se pueden contemplar los ejemplares más antiguos de secuoyas de España. Estas plantas, popularmente conocidas como mariantonias, fueron traída por el Marqués de Corvera desde Yorkshire Park y plantadas en la finca del cortijo de la Losa. La etapa finaliza en Castril, precioso pueblo ubicado en la falda de una escarpada peña. De Castril, que sorprende por la diversidad y variedad de su entorno, parte la cuarta etapa. Este pueblo posee un rico pasado marcado por la presencia de romanos. En el siglo XI se construyó sobre la peña un castillo con finalidad defensiva, a cuyo pie transcurre el río Castril, fortificación con magníficas vistas de la población, de su vega y de su sierra. A la sombra de la Peña sobrevuela el río sobre un andamiaje de antiguas traviesas de ferrocarril y una pasarela recorre una garganta llamada Cerrada de Castril. Al finalizar la pasarela un sendero cruza el cauce desde un puente metálico y continúa por una cueva de 70 metros de longitud. El Parque Natural de la Sierra de Castril es de visita obligada. Su principal valor ambiental es el río, responsable además de la fisonomía y la peculiaridad del entorno. Sus aguas emanan del corazón del Parque y lo recorren hasta el embalse del Portillo. El nacimiento del Río Castril es un sitio único, de extremada belleza. De las rocosas paredes brotan permanentemente sus frías y cristalinas aguas. Tras hacer un poco de senderismo, se vuelve al centro de Castril que posee un interesante patrimonio histórico cultural. También es conocida por su tradición artesanal, ya que durante mucho tiempo la extracción de madera para la fabricación de barcos y la industria del vidrio fueron su motor económico. Finalizada la visita en Castril, la ruta lleva hasta Castilléjar, específicamente a su Ecomuseo, creado para dar todo tipo de respuestas al público interesado en conocer las riquezas que se esconden tras la singular zona de badlands, insólitos paisajes semiáridos donde antaño se recolectaba el esparto y se extraían cristales de yeso. Las badlands, que ocupan numerosos parajes de las comarcas de Guadix, Baza y Huéscar, son un tipo de paisaje ruiniforme de características áridas y de litología rica en lutitas, extensamente erosionado por el agua y el viento.
El nombre de Castilléjar, punto de partida de la quinta etapa, deriva de un antiguo castillo que hubo en la localidad, aunque el pueblo sorprende al viajero sobre todo por sus característicos barrios de casas cueva, excavadas en la época musulmana, hacia el siglo XII, con una finalidad defensiva. Enormemente atractiva es igualmente la iglesia parroquial de la Inmaculada Concepción y el citado Centro de Visitantes del Ecomuseo de Castilléjar, donde se organizan actividades que giran en torno al tema del esparto.
Tras la visita a Castilléjar, aguarda Galera, pueblo repleto de historia y tradiciones y en el que hay que visitar su Museo, que conserva, exhibe e investiga su patrimonio y alberga objetos pertenecientes a prácticamente todos los periodos del desarrollo histórico de esta comarca, desde la civilización argárica hasta la Edad Media, pasando por la edad de oro de la villa: la época íbero-romana. El yacimiento arqueológico del Castellón Alto, poblado argárico parcialmente reconstruido y declarado Bien de Interés Cultural en 1996, es el visitable más antiguo de Andalucía. La sexta y última etapa conduce desde Galera y sus barrios trogloditas al lugar donde se inició la ruta, Orce, la cuna de los primeros pobladores de Europa. En Galera pueden conocerse sin interrupción los últimos cuatro mil años de buena parte de la historia peninsular. A las afueras están los yacimientos del Castellón Alto y en el centro histórico sus casas señoriales y la iglesia parroquial de la Anunciación, catalogada como monumento histórico artístico nacional. Y ya en Orce, rememorar con mayores fundamentos todo lo que dio sentido a esta interesantísima ruta por la comarca de Huéscar, la más grandes de la provincia de Granada y, sin duda, el gran universo de los primeros pobladores de Europa. Durante millones de años, la zona estuvo anegada por las aguas del mar e invadida por un inmenso lago en el que medraban fantásticos animales prehistóricos que compartían el mismo territorio con nuestros más remotos antepasados.
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